lunes, 2 de mayo de 2022

Felicidades a Todas las Madrecitas!

                                        Mensaje de Día de las Madres 2022

Hoy celebramos y festejamos un día, un día más en la vida, del cual agradecemos por el amanecer, por el atardecer, el anochecer. Pero hoy, al escuchar cantar a los pájaros, agradecemos la presencia del ser  que día a día apoya y cuida a todos. El ser que empuja – un pilar de la familia, un recordar para aquellos que hoy en día no cuentan con la presencia de este ser maravilloso, y para aquellos que la tienen y pueden disfrutarla el día a día, ser agradecidos por su presencia Madrecita Querida.

Cuantas lágrimas se derramaron cuando nacieron los niños –  cuando nacimos, cuando trascendieron en su momento aquellos seres que tenían que partir; tus lágrimas se derramaron Madrecita Querida, aquellos que tenían que irse lejos.

En el camino se olvidan que hay una presencia divina, la Madre. Cuánto amor es en ella! Cuánta devoción y entrega da en cada momento! Este ser da la vida en vida.

Al pasar el tiempo, la Madre se hace más sabia al comprender de los niños; crecen, reciben, y la vida tiene que enseñarles a enfrentar, con  sus propios temores, sus alegrías como sus tristezas.

Madrecita Querida, tu siempre a un lado para poderles guiar en esos momentos de preocupación y de angustia.  El tiempo transcurre, tu templo se cansa; la familia no lo ve, y sigues dando – sigues en esa entrega total para que la familia reciba.

Cuando llega el momento en que tu  templo ya no puede más, Madrecita Querida, el tiempo te alcanza, como el agotamiento físico, y solo buscas el espacio de confort para hacer el descanso eterno. Sin embargo tu presencia, tu esfuerzo y tu entusiasmo de seguir dando vida todavía, y apoyando a los niños, que ahora son también padres, y otros, abuelos. Y aunque el tiempo ha transcurrido, no ven la calidad de Madre que tienen, no ven al ser maravilloso que ha entregado su vida y que hoy el tiempo comienza a hacer mella ante tu presencia Madrecita Querida. Tus fuerzas se fueron físicamente, tu oído ya no es más fino, como tus ojos que están cansados de tantas lágrimas, de tanto dolor, de tanta confusión, como también de las alegrías.

Madrecita Querida, el sufrimiento, es un complemento, una devoción de vida, una transformación, hacer y hacerte más sabia, ser mejor y más asertiva; pero cuando el cansancio llegó, tu pensamiento y tu razonamiento también ya es cansado. Sin embargo con todo y con todas esas deficiencias, tu sigues dando y recordándoles con tu presencia, con tu palabra de repetición, pero estás ahí Madrecita Querida, siempre dando hasta el último momento. Tu amor es inmenso, esta entrega cual día y noche se presenta, siempre en tu presencia ES, ES, Madrecita Querida.

El descanso llega, el sufrimiento ya no existe, se transforma en alegría y devoción al escuchar a los nietos, a los bisnietos. Tu tarea continúa siendo y ES, ES, a través de la enseñanza para aquellos que vienen atrás y tienen que hacer camino. Tu devoción y entrega, y redención es inmensa Madrecita Querida.

Te agradecemos por tu presencia, por dar y dar, por escuchar, por guiarnos en el hacer y con la palabra, pero más en obra. Te agradecemos por estar aquí y dar tu amor inmenso incondicional.

Gracias, gracias, gracias Madrecita Querida. Gracias a todas ustedes, y gracias a aquellas que en el ayer y que en el hoy, que no tuvieron la calidad de ser Madres. Madres no solamente son aquellas que engendran, sino también son madres aquellas que guían, aquellas que se entregan para ayudar en vida en vida, dando vida. Siempre en unidad, siempre todas siendo Una.

Gracias, gracias, siempre para todas ustedes Madrecitas Queridas – siempre.
Con Amor, Por Amor,
Respeto, Humildad.
 
Así es familia.
Sirviéndoles con humildad.
Siempre reciban todas ustedes, reciban todas ustedes.
 
Con Amor, Por Amor,
Respeto, Humildad.
 
Así Es, Así Es,
Así Es, Así Es.

Madrecitas Queridas.